Dibujo de Fiona Martínez (nov 09)

jueves, 26 de junio de 2014

el sopapo

Sonaban las notas de su canción favorita y bebió el licor de las ocasiones especiales, ese que desde el primer trago le atizaba un latigazo entre las cejas, un shock & roll para sus neuronas;
pero la pantalla, otrora el folio, seguía de un blanco insultante, una daga en su orgullo.

Estaba por levantarse cuando la mosca con un descenso grácil se posó en su pantalla.

La norma establecía que antes de acertar al insecto con el manotazo habría de intentarlo un millón de veces; pero el día no estaba para normas por lo que el palmetazo reventó al bicho.

La sangre, esparcida aleatoriamente, compuso un extraño dibujo, aunque cuando nuestro personaje se fijó con atención comprobó que no era tal el dibujo, sino letras; letras que formaban palabras, frases, un párrafo. Y por increíble que parezca el párrafo tenía coherencia y sentido...